Diseñar proyectos regionales en la lógica de un desarrollo sustentable es viable
entre el sector público y las comunidades rurales que cuentan con destinos
turísticos naturales. Aquí se expone el caso de Taxco de Alarcón, “Pueblo Mágico”
a partir de 2002, debido a la calidad de su joyería artesanal en plata y las
construcciones de estilo virreinal. Esta municipalidad integra suntuosos paisajes
naturales, como las Pozas Azules de Atzala, la Cascada de Cacalotenango y las
Granadas (o Mil Cascadas); impresionantes paisajes aledaños a la ciudad, poco
conocidos por el turismo regional y nacional, debido carencias de promoción
turística.
Esta es una propuesta de desarrollo regional de turismo sustentable, a partir de la
integración de los habitantes de dichas comunidades, quienes asumen el cuidado,
mejoramiento y administración de su entorno natural. Parte de un diagnóstico e
investigación acción participante, que permitió constatar un déficit educativo de los
pobladores. Se destaca un modelo de desarrollo endógeno como clave para un
crecimiento favorable de territorios menos avanzados, como históricamente ha
sido el caso de entidades del sureste de México. Se alienta un desarrollo
comunitario autosustentable en base a un turismo alternativo, como oportunidad
de desarrollo sustentable en la región norte del estado de Guerrero.

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En este sentido las comunidades locales juegan un rol importante en esta
modalidad de turístico, pues son los mismos comunitarios quienes asumen la
responsabilidad del mantenimiento y la administración de las actividades que los
espacios naturales brindan. La estrategia es capacitación e instrucción para
involucrar a las personas nativas en proyectos productivos como el presente, con
el propósito de mejorar su calidad de vida y erradicar la migración de los
comunitarios a otros sitios en busca de oportunidades de empleo.