Objetivo: El objetivo de esta investigación es comprender cómo las creencias y prácticas vinculadas a la lógica económica son incorporadas al sistema de creencias de los dirigentes de las organizaciones religiosas, e influyen en la manera como éstos construyen su propia interpretación acerca de lo que es identitario de la organización.

Método: El diseño de la investigación se realizó de acuerdo con la metodología cualitativa y el paradigma interpretativo de las Ciencias Sociales. El método y la técnica de análisis de la información fue la fenomenología. Las técnicas de recolección de datos fueron: la entrevista semi-estructurada, la revision de documentos y la observación no participante. 

Resultados: El estudio arrojó que las creencias y prácticas provenientes de la lógica económica son incorporadas por los dirigentes principalmente a través de sus actividades cotidianas, mismas que están centradas en la gestión administrativa de la organización. Los significados inherentes a las creencias y prácticas -propias de la lógica económica- son reinterpretados a la luz del sistema religioso de creencias mediante la creación de elementos comunicacionales clave tales como fantasías, historias comunes, sistemas de creencias, mitos racionalizados, entre otros, que permiten la construcción de marcos comunes de significado, que dotan las prácticas administrativas de un sentido religioso, evitando de ese modo que se vean como “ajenas” al sistema de creencias de la organización.

Conclusiones: Se concluye que los dirigentes de las organizaciones religiosas, al igual que todas las organizaciones contemporáneas, se enfrentan a un ambiente institucional complejo en el que deben desarrollar múltiples estrategias que les permitan gestionar dicha complejidad sin alterar su identidad y sus valores esenciales. Una de las estrategias utilizadas por los dirigentes es construir explicaciones racionales acerca de sus prácticas manageriales, resignificando así creencias y prácticas seculares a la luz de su sistema religioso de creencias, logrando de este modo, un sentido de coherencia que les permite administrar la organización con un estricto criterio económico sin ser criticados o deslegitimados por sus miembros o por las demás organizaciones que conforman el campo organizacional. El equilibrio entre una adecuada gestión administrativa y el cumplimiento de su propósito misional, es lo que garantiza que la organización siga manteniendo su identidad religiosa y a la vez sea perdurable a lo largo del tiempo.