La presente investigación estudia las propiedades repelentes e insecticidas de los aceites esenciales de geranio (geranium), Lavanda (lavandulae angustifolia) y Romero (rosmarinus officinalis) en la pulga de gato (Ctenocephalides felis) para ofrecer una alternativa natural al control de plagas y evitando el uso de los ectoparasitidas químicos como el fipronil que afectan la salud animal, humana y ambiental. El uso de estos aceites esenciales puede ser una solución accesible y ecológica, especialmente atractiva para personas conscientes del medio ambiente y que buscan cuidar a sus mascotas de manera segura.

El principal problema de las infestaciones de pulgas en mascotas radica en la amenaza que representan para la salud y el bienestar tanto de los animales como del entorno doméstico. Los tratamientos convencionales, como las pipetas y los sprays, suelen contener compuestos químicos agresivos que pueden causar irritaciones cutáneas en los animales e incluso efectos adversos a largo plazo. Además, estos productos tienen un impacto ambiental considerable, ya que contribuyen a la contaminación química y pueden afectar a especies no objetivo. Ante este panorama, surge la necesidad de desarrollar alternativas más seguras y sostenibles para el control de pulgas.

En el experimento se recolectaron 55 pulgas utilizando la técnica del peine fino descrita por Aguilar Zapata (2024). Los especímenes fueron identificados como Ctenocephalides felis, con base en las características morfológicas de la cabeza y las antenas. Posteriormente, fueron expuestos a aceites esenciales de romero, lavanda y geranio, además de un control positivo (Fipronil) y uno negativo (agua destilada). El aceite esencial de romero mostró un aumento progresivo en su efectividad, alcanzando un 100 % de mortalidad al finalizar el primer día. El aceite de lavanda logró una mortalidad del 90 %, mientras que el de geranio presentó únicamente un efecto repelente durante los dos días que duró el experimento.