Experiencias de ensayos de autodefensa en plantas cultivadas
Un importante aporte de la Biotecnología e ingeniería genética y la Biología Molecular en el campo de la Fitosanidad, lo constituye sin lugar a dudas el tema de la inmunidad natural de las plantas mediante el papel de las fitoalexinas en los mecanismos de defensa. Los nuevos descubrimientos al respecto abren un campo inagotable del conocimiento que ha comenzado a gestarse a principios del presente siglo amparado en el desarrollo científico técnico alcanzado con las nuevas tecnologías en todos los ámbitos, permiten revolucionar entre otras vertientes la protección vegetal. Las plantas son invadidas por microorganismos patógenos que deterioran su crecimiento y reproducción; de ahí la importancia de esta revolución del conocimiento científico. Las plantas poseen un sistema de defensa que va desde barreras físicas hasta señales moleculares y sistémicas, similares a la inmunidad innata en animales. Este sistema actúa de dos formas fundamentales: (1) responde a moléculas comunes de muchas clases de microorganismos patógenos y no patógenos; (2) responde directamente a factores de virulencia de los patógenos o a sus efectores en el hospedante. Los aportes de experiencias prácticas propias en ensayos de inducción de autodefensa se han basado en la inoculación de simbiontes micorrizosfericos vesiculos-arbusculares (MVA) a plantas, en los casos de estudio en cultivos hortícolas de tomate (Solanum lycopersicun L.) y pimiento (Capsicum annun) cultivados en sistemas de organopónicos; así como plátano (Musa spp.) y frutales como papaya (Carica papaya) y piña (Ananas comosus) de forma convencional. Como simbiontes micorrizosférico se emplearon 3 especies del género Glomus: G. intrarradices, G. fasciculatum y G. mosseae. La valoración de cómo esta inoculación propició la estimulación de mecanismos de defensa se sustentó en el comportamiento comparativo de las epifitias (curvas epifitiológicas) de sus principales agentes fitopatógenos en particular de los hongos Alternaria solani, Phythothora infestans, P. parasítica, Colletotrichum capsici y Mycosphaerella fijiensis y el complejo vírico que afecta a la papaya. En todos los casos G. intrarradices mostró el mejor comportamiento inductor de autoprotección de los cultivos, repercutiendo a su vez en los rendimientos de cada uno con más del 33% de incremento respecto a las plantas testigos no inoculadas.
Experiencias de ensayos de autodefensa en plantas cultivadas
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DOI: 10.22533/at.ed.813232228045
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Palavras-chave: Fitoalexinas, simbiontes micorrizosfericos, Glomus, Alternaria, Phythopthora
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Keywords: Phytoalexins, mycorrhizal symbionts, Glomus, Alternaria, Phythopthora
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Abstract:
An important contribution of Biotechnology and genetic engineering and Molecular Biology in the field of Phytosanitary, is undoubtedly the subject of the natural immunity of plants through the role of phytoalexins in defense mechanisms. The new discoveries in this regard open up an inexhaustible field of knowledge that has begun to take shape at the beginning of this century, supported by the scientific-technical development achieved with new technologies in all areas, allowing for a revolution in plant protection, among other aspects. Plants are invaded by pathogenic microorganisms that impair their growth and reproduction; hence the importance of this revolution in scientific knowledge. Plants have a defense system that ranges from physical barriers to molecular and systemic signals, similar to innate immunity in animals. This system acts in two fundamental ways: (1) it responds to molecules common to many classes of pathogenic and nonpathogenic microorganisms; (2) responds directly to virulence factors of pathogens or their effectors in the host. The contributions of own practical experiences in self-defense induction trials have been based on the inoculation of vesicular-arbuscular mycorrhizal symbionts (VAM) to plants, in the case studies in horticultural crops of tomato (Solanum lycopersicun L.) and pepper (Capsicum annun) grown in organoponic systems; as well as banana (Musa spp.) and fruit trees such as papaya (Carica papaya) and pineapple (Ananas comosus) in a conventional way. As mycorrhizal symbionts, 3 species of the Glomus genus were used: G. intrarradices, G. fasciculatum and G. mosseae. The assessment of how this inoculation promoted the stimulation of defense mechanisms was based on the comparative behavior of the epiphytes (epiphytiological curves) of its main phytopathogenic agents, in particular the fungi Alternaria solani, Phythothora infestans, P. parasítica, Colletotrichum capsici and Mycosphaerella. fijiensis and the virus complex that affects papaya. In all cases G. intrarradices showed the best self-protection inducing behavior of the crops, in turn affecting the yields of each one with more than 33% increase compared to the non-inoculated control plants.
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Número de páginas: 13
- Andrea Romero
- Mina P.
- Méndez C
- Francisco Simón Ricardo
